Como ya se había mencionado en temas anteriores, en Perú se dio un cambio de paradigma económico durante la década de los 90 al pasar de políticas nacionalistas a políticas de corte neoliberal debido a la crisis que se presentó en el periodo 1985 – 1990.
La anterior medida trajo consigo una serie de reformas con el objetivo de superar precisamente la crisis que se vivía, al igual que en la mayoría de los países subdesarrollados en Perú se optó por realizar reformas a la constitución, se tendió a las privatizaciones, reformas tributarias, del gasto público entre otras medidas.
El panorama descrito se ve reflejado en el índice de libertad económica, entre mejor este ubicado un país en el ranking quiere decir que existe menor intervención por parte del gobierno, es decir es más libre en materia económica, asimismo se estable una relación positiva entre este índice y la prosperidad de la población tal y como se menciona en cada uno de los informes dados a conocer por la institución encargada de elaborar estos índices.
No obstante en Perú así como en la mayoría de los países latinoamericanos ocurre algo curioso, si bien es cierto que muchos de ellos logran tener un crecimiento económico y una estabilidad macroeconómica como es el caso del país peruano, no logran mejorar las condiciones de vida de la población sino absolutamente lo contrario.
Para entender lo anterior revisemos como Perú ha pasado de tener índices de libertad económica de entre 5 y 5.5 en la década de los 90 a situarse hoy en día en el lugar número 45 de 183 países con un índice de 6.7; pese a que los datos del BM en cuanto a porcentaje de pobreza de ingresos en el país peruano parecieran señalar una mejora derivada del nuevo modelo económico, al reducirse esta de 53.5% en 1994 a 49% en 1997, el panorama no es de todo alentador tal como lo muestra el estudio realizado por Luis Reyes Lostaunau titulado “Neoliberalismo, Pobreza y Políticas sociales en el Perú de los Noventa” en el cual se muestra como el modelo neoliberal en Perú logró la estabilidad macroeconómica a costa de una recesión muy extendida del aparato productivo, si bien se crearon nuevos empleos todos eran de carácter informal, además de ello aumento considerablemente el número de niños empleados con jornadas de trabajo de hasta 15 horas.
Siguiendo al autor, también menciona que en los primeros años de la década de los 90 la pobreza aumentó como resultado directo de la política neoliberal y que la reducción que presento la misma a partir de 1994 no fue resultado de este nuevo modelo económico sino de otros factores tales como: Transferencias de dinero de peruanos que residían en el extranjero a sus familiares, reducción de la tasa de crecimiento poblacional y de la ayuda que recibieron los más pobres de la cooperación internacional.
En síntesis Lostaunau considera que el modelo neoliberal empeoro las condiciones de vida de la población y crítica fuertemente a aquellos que ven la pobreza únicamente como resultado del ingreso, en Perú actualmente según este autor además de que no existen seguros de desempleo, no existe ni calidad ni seguridad en los mismos, observación hecha en base al alto número de despidos injustificados durante la década de los 90.
En base a lo anterior y tratando de homogenizar lo que resulta de las políticas neoliberales, consideramos que al igual que Perú la mayoría de los países que han adoptado este modelo económico han perdido la garantía pública en cuanto a los servicios básicos y por ende los niveles de pobreza se han incrementado, el caso de Perú nos dice que pese a que los datos muestran una reducción de la pobreza en base al ingreso, las condiciones de vida de la población no son mejores que en los años 80 y que cada vez sus problemas se agudizan más.